Círculo Concéntrico
Esta forma de representación es poco usada, pero tiene gran potencial entre los estudiantes y docentes. Su creador Román y E. Diez, lo propusieron en 1990, quienes afirman que los círculos concéntricos, también conocidos como Módulos de aprendizaje concéntrico, apoyan aprendizaje significativo, en teoría de redes, esquemas y mapas conceptuales. La idea de estos mapas es que el concepto incluso del contenido pueda estar representado en el círculo central más interior, de manera que incluya el concepto, tema o unidad, hasta otros círculos que incluyan otros conceptos menos abstractos y derivados de los más cercanos al círculo inicial. Los círculos concéntricos son representaciones del conocimiento en forma conceptual.
Pasos para su elaboración
Los objetivos de este tipo de técnica son:
CARASTERÍSTICAS
PARTICIPANTES:
Podemos realizarla con todo tipo de grupos desde niños, jóvenes e incluso adultos.
TIEMPO:
Depende del número de participantes del grupo, aproximadamente su duración está entre 15 – 20 minutos.
MATERIAL:
Papelote
LUGAR:
Se precisa de un espacio amplio, ya sea tanto abierto como cerrado.
PROCESO:
Los participantes se sitúan en dos círculos concéntricos. Los del círculo interior se colocan mirando hacia fuera, de manera que tengan en frente su pareja del círculo exterior. El director/a del juego irá leyendo unas frases que serán el tema de conversación con su respectiva pareja, cuando el animador/a diga “¡ya!”, comienza a girar el círculo exterior un lugar, si anteriormente habló solamente el del círculo exterior, ahora sólo hablará el del círculo interior igualmente hasta que el director/a del juego diga “¡ya!”. Tras varias tandas se puede cortar el juego.
OBSERVACIONES:
Entre todos los integrantes del grupo comentaremos el juego, algunas de las preguntas que provocará el animador serán: cómo se han sentido, si les ha divertido, y si fuera el caso contrario, no ha gustado la técnica, escuchar el por qué.